Una anciana se acuerda del paralelo que hacía, de niña, entre los humanos y los números. Esta relación está ilustrada en el material de archivo fílmico y digital, reforzando la idea del paso del tiempo y de los ciclos de la vida. En esta película ligera y profunda, se pasa de películas de la infancia grabadas en super 8 a videos de la vejez filmados con celulares. El futuro digital del hombre dejó de ser una proyección infantil para convertirse en una extraña realidad.